Mantener un peso saludable es importante para la salud. Además de reducir el riesgo de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, diabetes y presión arterial alta, también puede reducir el riesgo de muchos tipos de cáncer diferentes.

Como mantener un peso sano

 

Mantenga un diario de alimentos

Llevar un diario de alimentos puede ayudarlo a comprender mejor la cantidad de calorías que consume cada día. Tome nota de los días que parecen fuera de lo común y trate de descubrir por qué estaba consumiendo mucho más (o mucho menos) ese día que en otros. Esto puede ayudarlo a identificar los desencadenantes que le causan comer en exceso.

Evalúa tu nivel de actividad física

Al igual que con su comida, también podría ser útil llevar un diario de actividad física durante al menos una semana. Asegúrese de incluir actividades diarias, así como tiempos de ejercicio dedicados. Por ejemplo, si habitualmente sube tres tramos de escaleras para llegar a su oficina cada mañana, esto debe incluirse como actividad física. La limpieza de la casa o pasear al perro también son actividades físicas diarias.
También debe calcular el período de tiempo cuando no está activo. Por ejemplo, si pasa cuatro horas al día sentado en su escritorio en el trabajo, esto debe incluirse en su diario de actividad física.

Ajuste su ingesta calórica según sea necesario

Si bien su objetivo puede ser mantener un peso saludable, su peso puede fluctuar entre 5 y 10 libras regularmente por varias razones diferentes que no están relacionadas con su nivel de alimentación o actividad física, como las hormonas o el estrés.

La clave para mantener un peso saludable es encontrar el equilibrio adecuado entre las calorías que consume y las calorías que su cuerpo quema para obtener combustible. Es posible que no pueda mantener su peso simplemente consumiendo la misma cantidad de calorías todo el tiempo.

Desayuna todos los días

Comenzar el día con un desayuno saludable es la mejor manera de acelerar su metabolismo y darle la energía para concentrarse y desempeñarse durante todo el día. 
Por ejemplo, puede tener tostadas integrales cubiertas con un huevo y un tomate. Si no tiene tiempo para preparar el desayuno por la mañana, puede optar por un batido de frutas que incluya un refuerzo de proteínas.

Incluya muchas frutas y verduras en su dieta

Las frutas y verduras son opciones de alimentos relativamente bajos en grasa que están llenas de vitaminas y nutrientes que su cuerpo necesita. Debes tratar de consumir al menos dos porciones de fruta y cinco porciones de vegetales al día. 

Carnes magras y fuentes de proteínas

Las aves de corral, pescado, frijoles, nueces y huevos son fuentes magras de proteínas que le darán a su cuerpo el combustible que necesita para desarrollar músculos fuertes. La carne que comes debe ser asada o asada en lugar de frita.

Limite su consumo de azúcar

El consumo de azúcares y grasas saturadas puede hacer que aumente de peso, incluso si el resto de su dieta es relativamente saludable. Tenga cuidado con el azúcar agregada en los alimentos envasados, especialmente las cenas congeladas y las comidas de pasta que no consideraría dulce.
Intente tomar una manzana mediana o una taza de uvas como refrigerio en lugar de galletas o pasteles.

Beber abundante agua

La cantidad de agua que necesita para mantenerse adecuadamente hidratado depende de su tamaño y de su actividad física. En términos generales, sin embargo, debes beber al menos ocho o nueve vasos de agua al día. 
Tenga en cuenta que si tiene sed, eso significa que ya está deshidratado. Beba agua constantemente, no solo cuando tenga sed.

 

Déjate asesorar por los que saben y tener una rutina nutricional para ti.